Una académica y tres legisladores expresaron la necesidad de preservar los parlamentos regionales, en un coloquio sobre el aporte de estos órganos de control al desarrollo de los estados y el país, que organizó la Cátedra Libre Andrés Bello de la UCAB.
En medio de las complejidades del país, los estados como expresiones del federalismo y los parlamentos legislativos deben tener cada vez más relevancia nacional para crear espacios que favorezcan el encuentro y la participación ciudadana en el proceso de reconstrucción institucional.
Fue el planteamiento expuesto en el coloquio “Los Parlamentos Regionales en Venezuela, aporte al desarrollo de los estados y del país”, que organizó la Cátedra Libre Andrés Bello, Ética Cívica, Legislación y Administración Local de la UCAB con el propósito de contribuir con el debate de temas de relevancia nacional, ante la proximidad de las elecciones legislativas nacionales y regionales.
En este conversatorio, la investigadora Andrea Mesa, autora del libro “El Órgano Legislativo Estadal venezolano, estudio histórico y de derecho comparado”, y los legisladores Iraida Villasmil, presidenta del Consejo Legislativo del estado Zulia; y de Jackson Páez y Adonay Ochoa, presidente y expresidente respectivamente del Consejo Legislativo de Cojedes, expusieron sus experiencias y visones, tanto académicas como prácticas, sobre el funcionamiento del parlamento estadal en el país y su relevancia institucional para hacer política y ciudadanía.
Al presentar el coloquio, el profesor Ramón Guillermo Aveledo, director de la Cátedra Libre Andrés Bello, explicó que el evento busca revisar el ejercicio de los parlamentos estadales, a propósito del año electoral en las regiones.
“La existencia de un órgano legislativo, que al mismo tiempo que legisla y controla al ejecutivo, lo hace en nombre del pueblo, no es individual, y refleja en la medida de lo posible las diversidades que hay en cada tema. A eso hay que prestarle atención”, señaló.
El encuentro fue moderado por el profesor Jaiber Núñez, quien destacó la trascendencia del tema desde el punto de vista político e institucional, toda vez que “los estados, desde la lógica constitucional, han sido minimizados frente al poder nacional en un país que nació desde los municipios”.
Federalismo e institucionalidad
Mesa, joven jurista especializada en Derecho Parlamentario, abordó el tema sobre los parlamentos estadales e institucionalidad federal, el cual ha estudiado en los últimos años, y lo hizo con visión local y académica, convencida de que “al legislativo estadal hay que darle cada vez más peso en la reconstrucción institucional del país”.
“Se nos pasa siempre lo federal, e incluso en el momento de mayor avance con la descentralización (1989-1998) no se alzó abandera del federalismo”, señaló, lo que evidenció su investigación.
En su estudio histórico sobre el consejo legislativo venezolano, el segundo que existe sobre el tema en el país, comparó las 25 constituciones y 24 reglamentos de interior y debate de los consejos legislativos estadales que en la actualidad “son la copia” de la ley nacional que los rige o de la propia constitución de cada estado.
Encontró que en 21 de las 25 constituciones que han sido nominalmente federales esa aspiración no se materializa en su totalidad.
En las únicas constituciones donde no hemos sido federales en el período de la Gran Colombia y luego con los Monagas se suprimieron los parlamentos en las provincias o entidades subnacionales”.
Además, constató que “no hay una verdadera autonomía reglamentaria para los consejos legislativos, y la ley nacional en un Estado federal como el nuestro, si el órgano legislativo tuviese el peso que debe tener, no atiende a la realidad política, económica, social y geográfica de cada estado”.
Afirmó que en el diseño constitucional venezolano, el federalismo “es un poco fallo” al no dar amplia mayoría de competencias a los estados y aun si fallan se les ha revertido, lo que ha impactado en el trabajo de los parlamentos estadales”.
Mesa destacó que el hallazgo más resaltante de la investigación sobre parlamentos estadales fue poder categorizar al órgano legislativo estadal como órgano constitucional.
“Es algo muy teórico que al legislador no le parece tan importante en la práctica, pero sí lo es porque cuando se tipifica de esa manera es muy difícil eliminarlo. Además, el Estado venezolano no funcionaria del todo bien como estado federal descentralizado si no existieran los consejos legislativos”.
Recordó que el consejo legislativo es un órgano, no accesorio a la gobernación, sino de control, de legislación y contrapeso frente a los otros órganos del poder público estadal, con rango constitucional, pero que en la práctica se encuentra supeditado a la ley Orgánica nacional, cuyo contenido consideró es un error, pues se extralimita en las potestades reglamentarias propias de cada uno.
“Hay que darle más fuerza y poder a las instituciones federales, eso no solo nos va a hacer mejores como república, sino que también podremos atender los problemas de los estados con la particularidad de cada uno de estos”.
Desde el Legislativo regional
Villasmil con récord de permanencia en el Consejo de Zulia (2022-2026), compuesto por 15 legisladores de tendencias políticas diversas, expuso en el coloquio un trabajo ejemplar, con cantidad de leyes aprobada con consenso, frente al Legislativo regional, en un ambiente de entendimiento político.
Dio inició al relato de experiencias desde estos órganos regionales.
“Es bueno sumar pero más fácil multiplicar para marcar una realidad de entendimiento para todos los que defendemos al parlamento regional y para ejercer ciudadanía con espacios para poder escuchar a la gente”, dijo la jefa del Legislativo durante su intervención.
Aseguró que durante su trabajo al frente del Consejo, “la concentración del poder central contrario la descentralización”, les ha exigido a los parlamentarios regionales “ser creativos y creadores ante la nueva realidad política que hay que manejar”.
Sobre esa labor compartida, como en pocos parlamentos estadales, señaló que las comisiones permanentes designadas en enero hay que darlas a conocer para proyectar el trabajo, pero eso depende “de cada activista político”.
“Desde el trabajo del consejo legislativo nos hemos propuesto rescatar la confianza ciudadana, el Vuelvan Caras y el gentilicio zuliano.
Por su parte, Páez compartió su experiencia particular frente al Legislativo de Cojedes, con siete diputados, que “había sido convertido en una dirección del Ejecutivo regional y abandonado” en los últimos 10 años.
Explicó que durante su gestión se crearon cinco comisiones permanentes y subcomisiones en las que cumplen con los debates y se comparten visiones en un trabajo democrático y abierto al ciudadano que quiera participar.
En el Consejo se han aprobado 25 leyes, entre las cuales se destaca la de Cuencas que establece la protección de los ríos y que ha servido de referencia a otros estados, según aseguró.
“El parlamento regional es vivo. Hay que defender los parlamentos legislativos porque son espacios de encuentro y participación, y hay que fortalecerlos con nuevas herramientas”, expresó Páez.
La posición del presidente del Legislativo fue apoyada por su antecesor Adonay Ochoa (2024-2025), quien centró su intervención en describir el estado deplorable en el que encontró el órgano de control estadal.
Resaltó el incumplimiento del Ejecutivo central en no cumplir con el situado constitucional, asignación del 20% de los recursos petroleros, y la discrecionalidad del gobernador de turno, como muestra de la falta de respeto a la autonomía estadal.
“La verdad es que hay que defender a los parlamentos legislativos, la institucionalidad democrática para defender los espacios de la ciudadanía”, aseguró.